Era un beso enamorado

Era una noche sin luna

una abeja sin su miel

un amor sin la fortuna

una caricia sin la piel



Era una lucha entre el bien y el mal

una fria tormenta en el desierto

un amor sincero e incondicional

sin horarios y sin tiempo.



Era un beso enamorado

sin ardides, sin canción

Era un amante improvisado

era un sueño, una ilusión

 

 

 

El grito!!

He visto noches de insomnios eternas.

Estrellas fugaces, que se van en un solo pestañar

son tan misteriosas como hermosas

dejando la esperanza de una nueva ilusión

¡Mañana es posible!



Hoy la soledad cala los huesos,

como el frío de la madrugada a la intemperie.

Observo como tu mirada vacia,

se pierde en el horizonte.

mis ojos arden de guardar tanto dolor

mi garganta ahoga ese grito ensordecedor

que quiebra hasta los huesos.

Solo me queda ponerle fuego a este dolor

respirar en la brasa es comenzar de nuevo

quemando todo recuerdo, en la hoguera del desamor.




Mi cuerpo hace vigilia, inmóvil, quieto, esperando...

esperando ese beso demorado del ayer,

que en mis noches largas de insomino

tú me quedaste a deber.